Alicia
Herrera Ulibarri
Soy profesora de biología y doctora en oceanografía. Uruguaya de nacimiento y canaria de adopción, desde 2007 resido en las Islas Canarias donde he podido aunar mis pasiones: el mar, la ciencia y la educación.
En la actualidad soy investigadora del Grupo de Ecofisiología de los Organismos Marinos (EOMAR) del IU-ECOAQUA de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Mi principal línea de investigación se centra en el estudio de los efectos de la contaminación por microplásticos en los ecosistemas marinos. He participado en diversos proyectos y campañas oceanográficas, y liderado el proyecto MICROTROFIC que recibió en 2020 el primer premio de la Cátedra Telefónica en la categoría investigación. Los resultados de nuestros estudios se han publicado en revistas internacionales de prestigio como Science of the Total Environment, Marine Pollution Bulletin y Progress in Oceanography, entre otras.
Las investigaciones llevadas a cabo en Canarias sobre la contaminación marina por plástico me han llevado a tomar consciencia sobre esta problemática y comenzar una amplia labor de divulgación sobre los resultados de nuestros estudios. En los últimos años he participado en numerosas charlas, entrevistas, talleres y conferencias, en las que pretendo acercar la ciencia a la ciudadanía con el objetivo de generar un cambio de consciencia personal y ambiental. Recientemente me ha sido otorgado el premio "Hacedores del Cambio" edición 2022, en la categoría investigación y ciencia, una iniciativa para visibilizar y agradecer la labor de personas, empresas y entidades que ayudan a cambiar el mundo.
Además de investigadora y divulgadora, soy buceadora y fotógrafa submarina, utilizando mi cámara para mostrar la belleza que albergan los fondos marinos, pero también para mostrar el daño que están sufriendo. Algunas de mis fotografías denuncian el impacto antropogénico sobre el planeta, como la foto de una medusa con un plástico en su interior, que ha sido portada de algunos periódicos y ha dado la vuelta al mundo.
Fruto de esta creciente preocupación por la salud de los océanos nace Latitud Azul, asociación para la conservación medioambiental de la que soy cofundadora. Latitud Azul promueve proyectos de conservación medioambiental, violencia cero, y de ecofeminismo e igualdad, desde el convencimiento de que el cuidado de las personas y del planeta van de la mano.